El pesado de los SMS era un sensible...

Anoche, en una fiesta, me encontré con mi amiga que me presentó al "pesado de los SMS". Nos pusimos al día en varias cosas, y me dijo "pensé que ya estabas re de novia con el Langa" yo me reí y le dije "nada que ver, yo estaba en otra" y me dijo que lo sabía, porque se había cruzado con este chico hacía un par de semana, y cuando le preguntí por mi, le dijo esto "no voy a hablar de esa, es una mierda". Yo abrí mis ojos grandes y el dije "what??? qué hice ahora??" y le dijo que el no quería contar, pero que le mandé un mensaje re cortante...
Por supuesto, le expliqué lo debidamente posteado acá, y cuando supo lo que el Langa dijo, justificó que fuera cortante. Pero también me contó, que le preguntó a su novio porqué el Langa no quería hablar de mi... era porque estuvo llorando por mi, y no sólo eso, sino que estuvo triste dos meses, esperando a que lo llamara, lo invitara a mi cumpleaños, lo saludara por el suyo (se que cumplía por mayo, pero no que día), hasta que se dio cuenta de que no iba a volver. Yo me reí, y le dije, dejá de hacer jodas con esto... Y ella me dijo que no, que todo era cierto, que los amigos lo apoyaron en ese momento y que por suerte ya está un poco mejor.
Cuando me enteré de esto, me sentí mal, porque yo me jactaba de no haber hecho sufrir a nadie, pero me di cuenta que por primera vez, alguien sufrió por mi. Nunca pensé que por haber salido 2 veces con él, este chico podría haberse enganchado así (es más, me parece demasiado, porque no pasó nada con él).
En ese momento mi amiga me dijo: "viste?? vos lo hiciste sufrir a él y decías que era el pesado de los SMS... al final la cosa se te dio vuelta, y el pibe al que le dabas bola en ese momento, desapareció... y para él, seguramente fuiste la nueva pesada de los SMS". La miré, y le dije, ya lo dijo la filósofa Silvia Süller "la vida es un boomerang". Mi amiga me miró y le dije "al final me hicieron lo mismo que yo le hice al Langa, pero la diferencia está en que solo nos vimos 2 veces en menos de 6 días... y fui muy obvia al momento de expresar que no quería saber nada, no fingí que estaba todo bien. Además, los sentimientos no se fuerzan".
Al rato, comenzaron a servir la cena, esperamos el sorteo... mi peculiar número no ganó nada (tenía el 69), y luego bailamos toda la noche... obviamente, brindamos por los amigos y por Maikol (también bailamos sus temas) y me divertí como hace tiempo no lo hacía.