Back in Buenos Aires...

Jueves 2, aeropuerto Córdoba, despegó el avión de LAN que me depositó en aeroparque. Allí me esperaba mi ContaAmigo, que con su alma de taxista, se había ofrecido ir a buscarme, y en ese momento, comenzaron mis peripecias.
El AmigoMóvil hacía el ruidito de un canario... era el embrague. Salimos de aeroparque y como el muchacho era un buen taxista, tomó el camino equivocado y terminamos por la zona de Retiro... así que dimos unas vueltas hasta llegar al barrio donde ContaHermano habita. Casi llegando a destino, el AmigoMóvil dijo basta, y comenzó a largar humito... esperamos un rato, y pudimos seguir camino... pero a 2 cuadras, se paró el auto y no arrancó más. Así que hubo que llamar a SOS para que rescatara al pobre vehículo (por lo menos, tuve la cortesía de llevarle un presente, cosa de que se embriagara al momento de pagar el arreglo del embrague).
El viernes, me levanté, fui a desayunar a Nucha, donde me violaron al cobrarme por 3 tostadas, 3 scons y un café $16!!! (sabía e iba al Mc a desayunar como cerdo por $8), e hice mis diligencias, hasta llegada la tarde, donde el ContaAmigo me llevó a tomar algo por ahí cerca, y como no tenía medios de transporte hasta las 4, para volver a su hogar, se quedó a dormir en casa... El único que durmió fue él, porque era un tractor como roncaba... debería haberlo grabado!! A las 5 se fue a su casita, me deseó buen viaje de regreso, y me dejó dormir.
El Sábado, gran juntada gran con la gente del otro blog, éramos 10 monos en la casa de Sil donde nos quedamos desde las 17 hs hasta las 5 AM... obviamente, llevé alfajores cordobeses, y me cargaron por mi toooonada. Pasamos una tarde muy buena, y ya quedamos que haremos otra reunión en mi próximo viaje.
El domingo, fui a almorzar a "Carlitos" con un colega, donde comimos opíparamente, y luego caminamos por ahí, y me hizo el aguante hasta que se hiciera la tardecita, ya que tenía que encontrarme con un amigo en el Alto Palermo. Allí, vimos a un matrimonio de ancianos durmiendo con sus bocas abiertas a más no poder (pasamos 2 veces, porque no podíamos creer semejante escena!), y su hija concentrada leyendo el diario.
Cuando pasamos con mi otro amigo por la zona, los viejos se habían despertado, así que no me pude reir por tercera vez de esa escena. Tomamos algo, charlamos, me acompañó a casa, y seguimos dándole a las Pringles... seguimos hablando, y se fue justo cuando empezaba Grey's Anatomy.
El lunes, llovió, así que hice unos trámites, y fui a almorzar a la casa de mi amigo el consejero, donde me quedé hasta las 4, luego intenté conectarme a internet en dos cyber, armé mi valija, llegué a aeroparque, compré los regalos pertinentes, y tras cierta turbulencia, arribé a Córdoba.
Cuando me tiré en la cama a ver Grey's Anatomy, me di cuenta que lo que me había hecho mal el día que llegué fue un yoghurt vencido (y si, lo había comprado en mi viaje de mayo)... eso me pasa por no prestar atención cuando las cosas tienen vencimiento. De ahora en más, estaré más atenta...