Las aventuras de Conta Dora y sus secuaces! (3)

El Contatour, incluyó un paseo por Belgrano, para conocer el barrio Chino, donde los supermercados Chinos no son como los que estamos habituados a ver, sino, que eran supermercados para chinos! Compramos muchas boludeces, entre ellas, la raquetita picaneadora de bichos, para que no me jodan más las polillas, mosquitos y moscas(obviamente, tuve que cuidar a Brisa para que no pusiera el dedo para probar la potencia de la raquetita nuevamente) y quien dice, podría usarla cuando me rompan el corazoncito!! :D

Cuando compramos lo suficiente, nos dirigimos a Recoleta, y visitamos el cementerio. Nos indignamos al ver que en mapita de referencias no se encontraba a Velez Sarsfield (cuyo cadaver no está en el cementerio, sino en la Docta... pero el mausoleo es imponente!). Seguimos recorriendo, y en una tumba había una parejita de pendejitos vestidos de negro apretando en el marmol negro... me dio asquito!! lo que faltaba, que garchen arriba de los muertos, que pendejos asquerosos... en vez de ir a estudiar... es el colmo, ni en telo gastan! Tras sacarnos fotos con Alfonsín, los padres de San Martín y demás muertos, nos pintó el hambre, y terminamos en Carlitos dándole al panqueque con cerveza (ojo, comimos panqueque y bebimos cerveza... no es la varidedad ContaDora de panqueque a la cerveza), y para bajar un poco el panqueque Maradona (DDL, banana, coco y chocolate) fuimos caminando hasta el patio Bullrich, donde nos probamos ropa y perfumes que no compramos (aunque se viene mi cumple, así que pueden enviarme el perfumito Pupa Gold a mi domicilio!). Caminamos un poco más y nos fuimos al dpto para cenar y acomodar las cosas... porque Liza y Laura volvían a Córdoba al día siguiente.
El martes fuimos al Jardín Japones, vimos los pecesotes que buscaban ser alimentados, nos sacamos fotos y nos reimos porque además de pagar la entrada, te cobraban el alimento de SUS peces! Negocio redondo! Así que como somos ratas matriculadas, nos pusimos cerca de un niño que los alimentaba y sacamos las fotos, sin poner un mango más. Salimos y nos dirigimos al planetario... al cruzar la calle nos sacamos la foto tipo Beatles cruzando Abbey Road, corrimos a los gansos del laguito frente al planetario... y más tarde, nos dirigimos al centro para comer en mi lugar favorito: El Palacio de la Papa Frita, donde comimos las famosas Papas Souffle.
Recorrimos nuevamente el centro de CABA, caminamos hacia el Abasto, donde seguimos probándonos cosas y volvimos para buscar las valijas de las chicas que debían volverse... Las acompañamos a Retiro, y como no se conseguían taxis para volver, caminamos un poco por Libertador... allí encontramos un taxi, íbamos charlando animadamente con Brisa y ella elogiaba el quilombito del restaurant donde estafan a la gente y le dije a Brisa, "si, en CABA siempre te quieren cagar" en ese instante, vi que el taxi siguió derecho y no dobló donde debía, así que agregué "por ej. ahora, que nos están paseando". El taxista montó en cólera, discutimos un poco y el tipo nos hizo bajar entre los bosques de Palermo y la calle a la que nosotras íbamos (pero, del otro lado, no del lado al que nosotras íbamos), y le dije "acá no es" y me dijo "si, caminen las dos cuadras que faltan". Como conozco MUY BIEN donde tengo el dpto, le dije "no, esto es cualquier lado, no le pienso pagar" y con Brisa nos bajamos dejando el taxímetro con 17 pesos marcados...
En ese instante, salía un viejito de un edificio, que nos indicó cual era Libertador, así que retomamos nuestra ruta en otro taxi, que nos cobró sólo 7 pesos... así que a la diferencia, la usamos para desayunar en McDonald's al día siguiente, para luego volver a Córdoba.