El mundo es un pañuelo... y yo muy decente...

Esta mañana, ocupada con mis tareas ya que esta tarde comienza el Congreso Nacional de Ciencias Económicas (por eso no postearé hasta la semana que viene), tomé un taxi y de pronto siento algo duro que vibra sobre mi cola... me corro, lo miro y era un celular (no sean cochinos!!!)
No le digo nada al taxista (ya que son unos delincuentes... no te dan un vuelto, seguro que encuentran el celu y lo venden en Galería Norte) y lo guardo en mi cartera.
Cuando llegué a la oficina, busqué por todos los medios comunicarme con el dueño, mandé mensajes a todos sus contactos: "encontré este celular. Avisenlé al dueño así se lo devuelvo", llamé a un par... y nada. Hasta que un porteño respondió el mensaje contestando "hola amigo, todo bien?"
Al leer esto pensé... es boludo o se hace??? Te estoy diciendo que encontré el celular que estaba perdido... no soy tu amigo!!! Pero contra la gente boluda no se puede hacer nada. Lo llamé y le avisé lo que había pasado, que se comunique con el dueño del celular y me avise así se lo devolvía.
Al rato, recibí el llamado del dueño. Me preguntó en que parte de Cba. estaba y le dije que en el centro. Él, estaba en Nueva Córdoba... en la calle XXXXX... en la verdulería... pienso un poco y le dije. Si, ya se, si el otro día fui a comprar papas y bananas!! voy seguido allí cuando visito a mi ahijadito!!! Resulta que el Sr. perdedor de celulares es el vecino del frente de mi ahijado... El mundo es un pañuelo. Así que se lo devolveré en la próxima visita al bebé...
Ahhh... el Sr. perdedor de celulares me ofreció recompensa... un kilo de frutillas... Así que este finde prepararé Daiquiris de Frutillas... Esta noche ya las pongo con azucar para que se concentre el sabor...
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Supongo que Lord of Sarrios agendará la dirección de la verdulería!!!